El Parc Agrari del Baix Llobregat

Alianza entre el Parc Agrari y La Cuentista:

cultivando nuevas formas de entender la agricultura, desde una perspectiva urbana

©Lorena Álvarez Chávez 

Articular redes de agentes sociales, más allá de los límites imaginados, ha sido una de las características de la gestión de proyectos realizada por las integrantes de La Cuentista, Mariana Yáñez Rojo y Consuelo Barrera Jofré para llevar adelante la creación y la ejecución de la segunda etapa de “Amunt i Avall pageses, cucs i alls”, programa de actividades para la educación agrícola, desarrollado desde el lenguaje de las artes escénicas, incorporando el uso de nuevas tecnologías al interior de la sala de clases.

Es por eso que para su creación ha sido fundamental la sinergia entre agentes de las artes y de la educación, pero también del mundo agrario, cuyos conocimientos han permitido cultivar una experiencia significativa para los jóvenes espectadores de “Amunt i Avall pageses, cucs i alls”. En este ámbito, la institución aliada ha sido el Parc Agrari del Baix Llobregat, cuyo territorio conforma una de las zonas agrícolas más antiguas y fértiles de Catalunya. Creado en 1998, el Parque tiene como objetivos consolidar y promocionar la actividad agrícola en la comarca, impulsando programas específicos que permitan preservar los valores productivos del espacio agrario y potenciar el producto local de calidad y el consumo de proximidad.

Consuelo Barrera, integrante de La Cuentista explica cómo ha sido esta novedosa relación: “El vínculo que hemos establecido con el Parc Agrari, ha sido muy ventajoso para ambos, pues nos ha permitido tener diferentes perspectivas de cómo abordar un tema específico. Sobre todo, de dos áreas que podrían parecer incompatibles”. Para las gestoras del proyecto, esta relación ha sido muy nutritiva, pues les ha permitido entender las problemáticas profundamente, y frente a eso, aproximarse a una mejor forma de abordarlas. “Hemos ampliado el abanico de posibilidades, enriqueciéndolas, al colaborar con agentes que no son de nuestro medio, lo que implica asumir nuevos desafíos y nuevas formas de abordar el proceso creativo”, agrega.

El Parc Agrari ha sido un apoyo permanente para las creadoras, desde el inicio de este proyecto. En la primera etapa, los profesionales del agro cumplieron un rol activo desde la orientación, aconsejando a las artistas en lo que respecta al tratamiento adecuado de los contenidos, proceso que contribuyó a una mejor comprensión del concepto de agricultura, desde una perspectiva urbana.

“Esta iniciativa nos interesó porque cumple con el objetivo de difundir nuestros valores y al Parc Agrari. Este es un proyecto de educación agrícola dirigido a los niños. Y tiene el componente de la concienciación a una población -que de cierta manera- es un target para avanzar en la concienciación sobre el territorio, la alimentación y salud”, comenta al respecto, Gemma Francès i Tudel gerenta del Consorcio del Parc Agrari del Baix Llobregat.

La representante del Parc Agrari es enfática al explicar que cuando se dice concienciación, se está hablando de una serie de dimensiones: “Se trata de una visión de ciudad, de una visión de la importancia de tener una producción de alimentos cerca del mundo urbano; de los valores ambientales, de la preservación, de tener zonas verdes. Y luego, también de una dimensión económica y social, porque estás fomentando un desarrollo más local, más próximo, menos derrochador de recursos. Y todos estos son elementos importantes que los niños conozcan y les permitan adaptar un poco el paradigma tan agresivo que tenemos a nivel mundial”. Las temáticas que introduce “Amunt i Avall pageses, cucs i alls”, sobre la importancia del suelo y su salud ponen el foco precisamente sobre dichos aspectos.

“No somos conscientes de lo agresivos que podemos ser en el diario vivir con nuestro entorno cercano, pues se tiene la idea, generalmente, de que las zonas verdes deben estar fuera del perímetro urbano. “Amunt i Avall”, rompe ese paradigma, presentando un entorno real cerca de nuestra ciudad como es el Parc Agrari. En este sentido, los niños y niñas, ven los valores medioambientales y de buen consumo, reflejados en un lugar concreto y de proximidad”, agrega Consuelo Barrera.

Para Gemma Francès i Tudel, “hoy los niños tendrían que tener una nueva concepción de lo que es una ciudad”, y para eso, “la concienciación tiene que venir de base”. En ese sentido, la profesional ve con buenos ojos esta alianza con La Cuentista, pues confía en las transformaciones que puedan resultar de los procesos de aprendizaje: “Yo creo mucho en la educación -y no tiene porqué ser educación formal-, puede ser a través de proyectos de este tipo, que en algunos casos, quedan en el subconsciente de los niños más que un libro”.

Para quienes se interesen en conocer más sobre esta experiencia, el enlace de actividades para la sala de clases estará disponible en www.lacuentista.net (Eina Digital), de esta manera tanto las escuelas que forman parte de este proyecto como cualquier persona, podrá acceder a esta herramienta.

“De un tiempo a esta parte, hay un retorno a los valores medioambientales y un cuestionamiento al modo de vida actual. En este marco, mediante la representación del cuentacuentos y la posterior utilización de la herramienta digital, que ayuda en la profundización de los conceptos que trata el cuento, deseamos ser un pequeño aporte a ese cambio de mentalidad en nuestra sociedad”, concluye Consuelo Barrera.